El trabajo remoto como apoyo directo al medio ambiente

 





Además de sus inéditos y devastadores efectos en el panorama sanitario del planeta entero, el COVID-19 ha revolucionado la forma de trabajar en prácticamente todas las industrias. A partir del confinamiento preventivo, la mayoría de las organizaciones han implementado alternativas para sostener sus operaciones, siendo el trabajo remoto la más recurrida y exitosa de ellas. 


El trabajo remoto, también conocido como teletrabajo o home office, es sostenible incluso en el entorno post pandemia. Las organizaciones se benefician de los recursos ahorrados, la mejora de la productividad con horarios flexibles y la reducción de la rotación de empleados que esta modalidad tiene como consecuencias; además, se está aceptando como la nueva normalidad.


Se trata de una situación en la que todos ganan; y cuando decimos todos, nos referimos no solamente a los empleados y a los empleadores, también cuenta el impacto positivo que se genera para el medio ambiente. Desde hace varios años, las personas parecen estar tomando una mayor conciencia de la forma en la que sus hábitos y sus decisiones afectan al planeta. 


Así que los impactos ambientales positivos que se generan con el trabajo remoto son una de las razones más poderosas por las que cada vez más colaboradores prefieren esta modalidad de trabajo. 


1. Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero: El trabajo desde casa evita recorrer el trayecto al trabajo, lo cual ahorra no sólo tiempo sino también costos de transporte. Menos cantidad de personas en tránsito es equivalente a menores emisiones de gases de efecto invernadero. Si todos los empleados empiezan a trabajar desde casa aunque sea la mitad de la semana, las emisiones de gases se reducirían drásticamente. Los gases de efecto invernadero calientan el planeta. La liberación de tales gases es causada por diversas actividades humanas, siendo la quema de combustibles fósiles la principal de ellas. La cantidad de gasolina quemada por los motores de los vehículos crea una contaminación peligrosa. 


2. Aire limpio: La reducción de las emisiones de gases es sinónimo de aire limpio y saludable. Las grandes ciudades están llenas de vehículos que, a su vez, generan otros problemas como el caos vial y los embotellamientos. A medida que aumenta la contaminación, las personas luchan por respirar aire fresco, lo que provoca y agrava enfermedades respiratorias como el asma y las infecciones pulmonares. De hecho, la contaminación del aire causa más muertes que algunos padecimientos crónicos como el VIH o la tuberculosis. Los vehículos, por sí solos, contribuyen a un tercio del total de dióxido de nitrógeno en el aire. El trabajo remoto permite que los automóviles se mantengan fuera de las vialidades. 


3. Ahorra papel: Mientras los empleados acuden a la oficina, suelen imprimirse muchas más hojas de papel de las realmente requeridas. Algunos documentos se pueden leer en línea o en copia electrónica, pero en la oficina hay una tendencia a imprimirlos. En casa, están más atentos a la computadora y al cuidado de la economía. Además, con las excelentes plataformas virtuales disponibles en el mercado, el trabajo remoto se está volviendo conveniente para llevar a cabo incluso reuniones, eventos y seminarios web virtuales con igual (o más) éxito que el de las reuniones presenciales. El trabajo remoto también implica compartir archivos en línea, a través de correos electrónicos, la nube o archivos adjuntos. Si revisas el consumo anual de este insumo, te sorprenderás al ver que el trabajo remoto puede eliminar el uso de 247 billones de hojas de papel.


4. Menos uso de plástico: ¿Tienes la costumbre de tomar una taza de café de camino al trabajo, recoger el desayuno o comprar la comida para llevar? Cuando viajas al trabajo, tiendes a comprarlos casi todos los días de la semana laboral. Todas las botellas, utensilios de plástico, envases de alimentos, etc. se suman para aumentar significativamente la cantidad total de plástico utilizado. Los profesionales del trabajo desde casa tienden a adoptar suministros reutilizables, lo cual reduce seriamente la contribución al problema del plástico.


5. Impacto reducido en la infraestructura: Menos vehículos en las vialidades, sin atascos de tráfico, la reducción de las emisiones de los motores de gasolina también implican un menor mantenimiento de la infraestructura. De manera similar, las oficinas grandes consumen una gran cantidad de energía. El trabajo remoto los reduce, pues al ocupar cada empleado su propio espacio la organización requiere enfriar e iluminar menos oficinas. 


Estos son los principales beneficios de trabajar de manera remota. A medida que esta modalidad de trabajo se siga implementando, las grandes ciudades tendrán más lugares para respirar, una oportunidad para volverse más verdes y menos contaminadas, dada la reducción de la emisión de residuos. La urbanización es la causa del 5% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero, debido a la deforestación, así que la descentralización de las personas tiene un gran potencial para mejorar la calidad de vida de todos.


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