¿Conoces las cortinas ecológicas?

Aunque la mayoría de las personas las aprecian únicamente como un objeto destinado a la decoración, las cortinas cumplen un papel esencial cuando de generar confort y armonía en los ambientes se trata, principalmente por su capacidad para absorber la luz y el sonido que provienen del exterior. 

Pero, ¿Sabías que las cortinas también pueden ayudarte a ahorrar dinero? 

Nos referimos a las cortinas ecológicas. Gracias a la creciente preocupación que prácticamente todos los sectores de la sociedad están manifestando acerca del cuidado del medio ambiente, la la eco-industria de la decoración ha desarrollado tintas y textiles capaces de mantener espacios libres de contaminación, óptimos para las distintas actividades que ahí se desarrollan y saludables para quienes los habitan. 

Un ejemplo de los resultados de su constante búsqueda y hallazgo de alternativas amigables con el planeta son las cortinas ecológicas, que reciben este nombre no solamente por ser elaboradas, en ocasiones, con materiales reciclados o libres de químicos nocivos, sino que también pueden preservar el calor y la luz para mantener habitaciones más frescas y con ello, disminuyendo la demanda de energía eléctrica.

Cuando las cortinas son ecológicas, desvían la entrada de rayos de sol a las habitaciones, ayudando así a reducir los costos de refrigeración durante el verano. 

Para lograrlo, simplemente debes asegurarte de mantener las cortinas cerradas. En invierno, también debes cerrar las cortinas de las habitaciones que no estés usando para evitar que entren corrientes de aire. 

Se trata de una forma simple de contribuir a que tu hogar sea ecológico, saludable y seguro, pero, ¿Cómo saber qué cortinas son ecológicas y cuáles no? 

• Identifica los materiales de elaboración: Al elegir tus nuevas cortinas, descarta materiales como el poliéster, el nailon y el rayón, los cuales son sintéticos, están hechos de petróleo, mismo que además de ser pésimo para el medio ambiente y es un recurso no renovable. En su lugar, elige fibras naturales como el bambú, el algodón, el lino, la seda, el cáñamo y la lana. 

• Cuidado con la pintura: Elige telas que hayan sido teñidas con tintes menos tóxicos y de bajo impacto, para mayor seguridad tuya y de tu familia. Evita las cortinas recubiertas con tratamientos antimanchas y retardantes de llama, ya que contienen PFC y PBDE tóxicos, formaldehído y más.

• Toma en cuenta las características de la habitación: Las cortinas ecológicas son naturales y a veces rústicas. Si te preocupa el riesgo de incendio que representan las telas sin tratar, elige lana, un textil que es naturalmente resistente al fuego y tampoco se mancha tan fácilmente como otras telas.

• Elige colores opacos: Tal como lo harías al elegir unas cortinas black out, optar por tonos oscuros ayuda a mejorar la protección anti rayos solares de las cortinas ecológicas. Busca unas que combinen con tu ambiente y la decoración para notar cambios favorables en menos tiempo.

En cualquier caso, lo mejor es elegir cortinas con forro o respaldo para incrementar su potencial de ahorro de energía. Si al comprar las cortinas aún no están forradas, se puede agregar el respaldo con bastante facilidad y a tu gusto.

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