¿Sabes cómo empacan su ropa los militares?




Helen Adams Keller, escritora y activista política, decía que la vida podía ser, o una aventura, o nada. Juraba que todos tienen la capacidad para transformar el mundo, haciendo de un lugar aburrido uno emocionante. Su forma de ver la vida puede relacionarse con tu próxima mudanza, ya que el cambio puede representar sentimientos de nostalgia, por separarte del lugar que ya conoces, el que ha sido tu hogar en tantos momentos satisfactorios. Pero también, verte llegar a una nueva casa, tal vez más grande, más bonita o mejor ubicada, puede representar una emoción enorme. De lo que no hay duda, es de que mudarse siempre es una aventura. 

 

Entre muchas otras actividades, la mudanza requiere llevar tu ropa de un lugar a otro, algo que parece muy sencillo en el día a día pero que puede llegar a ser un martirio cuando te cambias de casa.

 

Mientras que al salir de viaje decides con mayor facilidad qué prendas llevas y cómo las acomodas en tu maleta, sabiendo que el resto de las prendas permanecerán en casa para cuando vuelvas, durante la mudanza te enfrentas al hecho de que, tal vez, no te sea posible regresar al lugar del que te estás marchando a recoger tus pertenencias. 

 

Para optimizar el espacio y ayudarte a llevar todos los artículos de tu  guardarropa, aprende cómo los militares empacan sus prendas y aplícalo en tu organización: 

 

  • Doba y enrolla: Doblar todo de la misma forma y tamaño hace que todo se vea más ordenado y que cada prenda ocupe menos espacio. La ropa más grande, como chamarras y pantalones, pueden ir enrollados para mantener la simetría con las demás prendas.

 

  • Lleva zapatos con ropa: Los militares saben que los zapatos son más pesados que la ropa. En las mudanzas, es común que agrupemos los objetos por similares, entonces tendríamos una mochila, bolsa o casa solo de zapatos, pero esta no es necesariamente la mejor idea. Sería más eficiente combinar ropa con zapatos en distintas bolsas, haciendo que cada una de ellas sea menos pesada y más facil de trasladar. 

 

  • La forma importa: Si ya has doblado tu ropa, la manipulación o el movimiento podría hacer que las prendas se desdoblen y pierdan su forma. Utiliza ligas o cuerdas para amarrarlas,  así conservarán su forma en todo momento y será mucho más sencillo desempacarlas.

 

  • Lo más pesado al fondo: Si tomas cada prenda individual seguramente el peso no te parecerá considerable, pero en conjunto, las camisas, pantalones, shorts y otras telas pueden llegar a formar bultos muy pesados. Para que puedas moverlos con comodidad, asegúrate de colocar las piezas más pesadas abajo, de esta forma no correrás el riesgo que puedan irse de lado si están apiladas unas sobre otras o si las estás cargando. 

 

  • Rellena con prendas pequeñas: Cuando hayas acomodado toda tu ropa en cuadros del mismo tamaño, es normal que notes que algunas prendas pequeñas te sobraron. Úsalas para rellenar los espacios que hay entre la ropa que ya está empacada.

 

Si no quieres llevar a cabo todo este proceso o simplemente tienes un clóset demasiado lleno y el tiempo no te alcanza para organizarlo, cotiza el servicio de empacado ejecutivo en www.cuberocrm.com/cotizador. ¡Déjanos ayudarte!



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