Los errores más comunes al mudarte
Dejar atrás una casa en
la que se construyeron memorias entrañables o la ciudad que ha sido tu hogar
durante toda tu vida puede ser una experiencia psicológicamente compleja y
demandante. Si a eso se le agrega todo el estrés que ocasiona buscar un buen
proveedor de servicios de mudanza y el tener que empacar cajas y cajas de
objetos, libros, ropa, etcétera, entonces la idea de mudarse puede parecer una
situación casi traumática.
Llegar a un nuevo hogar
debe ser un placer, una nueva aventura con muchas posibilidades de cambio y de
crecimiento personal. Esto puede lograrse si se evitan ciertos errores comunes
antes, durante y después de la mudanza. A continuación encontrarás una lista de
los errores que se cometen con mayor frecuencia y que impiden que la mudanza
sea una experiencia agradable y emocionante.
1. No hacer las cosas con tiempo. La prisa no es buena
consejera. Esto es cierto para la mayor parte de las áreas de la vida,
incluso para mudarse. La tarea de empacar debe comenzar alrededor de tres
semanas antes del día de la mudanza. Dejar las cosas para el último
momento significa caos, desorden y estrés. En el caso de una mudanza, la
falta de orden puede ser catastrófica y una verdadera pesadilla.
2. No saber el costo. Antes de comenzar a cargar tus muebles en
el camión de la mudanza, asegúrate de saber cuál será el costo del servicio. Lo
mejor es tener al menos un estimado del precio. Las mudanzas usualmente cobran
por distancia y por volumen, aunque pueden tener cargos extra.
3. No cuidar las cosas valiosas. Objetos de gran valor,
como joyas, documentos, colecciones de monedas, libros raros, dinero, cosas con
valor sentimental, etcétera, no deben irse en el camión de la mudanza, sino con
sus dueños.
4. No tener un kit de supervivencia. El kit de supervivencia
es la última caja que debe empacarse en la vieja casa y la primera que debe
abrirse en el nuevo lugar. Las cosas de esa caja funcionan como un kit de
supervivencia porque permiten que los días de transición transcurran con
facilidad. En esta caja puedes meter pijamas, algunas cobijas, el mapa de tu
nueva ciudad, toallas, cepillos de dientes, café, papel higiénico, etcétera.
5. No hacer un inventario. Para tener una mudanza
ordenada y organizada, se debe hacer un inventario de los objetos empacados y
del total de cajas armadas. Esto permite asegurarse de que todo llegue al
destino.
6. No contratar a profesionales. Para lograr que la
transición de un hogar a otro sea suave y sin problemas, lo más importante es
encontrar a un proveedor de servicios de mudanza que ofrezca profesionalidad y
experiencia. En este caso, el precio no lo determina todo: con frecuencia, los
servicios económicos pueden terminar por costar más.
Recuerda que un servicio tiene que ser 100% profesional, "lo barato sale caro", contrata a los profesionales en mudanzas.
Comentarios
Publicar un comentario