Pequeños pasos para mover tu oficina

Hoy en día las oficinas se han flexibilizado y para aumentar la productividad de sus empleados permiten que estos trabajen algunos días en casa. Por esta razón, todos tenemos algún espacio en nuestro hogar dedicado a nuestra vida laboral. También puede darse el caso de que seas un emprendedor y que el home office sea tu realidad cotidiana. En cualquier caso, tu lugar de trabajo es algo para empacar con cuidado al mudarte.

Si ya empacaste por categorías, tu oficina ocupa una completamente independiente y aún dentro de ella hay sub categorías.

Una mudanza es una oportunidad única para escombrar papeles viejos, revistas, publicaciones y otras cosas que se van acumulando y que solo nos ocuparían cajas y espacio en el camión.

Es una buena idea buscar un centro de reciclaje al cual llevar todos los papeles que descartes.

El siguiente paso es empacar tu escritorio, esto no es muy complicado, puedes guardar todo en los cajones y emplayarlo completo para moverlo así como está, de esta manera al llegar a tu nuevo hogar solo tienes que acomodarlo y desenvolverlo. 

Si tienes objetos frágiles en tu oficina como reconocimientos o adornos, envuélvelos en papel periódico de forma individual y cubre los espacios que quedan libres dentro de la caja para evitar que las cosas se muevan y se dañen.

Guarda tus cuadros y reconocimientos enmarcados de forma vertical en una caja y con amortiguación entre cuadro y cuadro para que no se golpeen entre sí o con las paredes de el contenedor en el que viajarán.

Tu silla de oficina es una gran aliada para completar tus proyectos, pero generalmente, estas se mueven mucho porque la mayoría son giratorias por lo que es una buena idea inmovilizarla por completo y proteger las áreas vulnerables con papel burbuja, así no se dañará o goleará algo.

Si tienes alguna computadora o equipo especial, desconéctalos con cuidado, amarra los cables y clasifícalos en una caja y márcala muy bien para identificarla con facilidad. Cubre e identifica pantallas y monitores, estos deben permanecer de forma vertical en todo momento ya que son muy delicados y pueden marcarse permanentemente si se aplica presión sobre ellos.

Empaca tus libros en cajas, no dejes espacios vacíos en ellas, usa libros grandes, pequeños y medianos para llenar cada uno de ellos y poder aprovechar al máximo la capacidad de tus contenedores. 

¡Tu oficina está empacada! Ahora tu servicio profesional de mudanzas no tendrá ningún problema para trasladarla a tu nuevo hogar.

Cotizar Mudanza